Frontera ruso-polaca (Foto: Tomek320).
Hacía tiempo que no leía una novela de
acción capaz de contener pasajes líricos y emocionar. El enamorado de la Osa
Mayor cuenta la vida que llevan en la frontera entre Polonia y la URSS los
contrabandistas, hombres la mayoría, pero también mujeres, que viven
peligrosamente para ganar buenas cantidades de dinero que gastan con alegría,
generando así una economía del placer en la que ganan prostitutas, taberneros y
vendedores de artículos de lujo, relativo pero lujo. La acción transcurre en
los años veinte del siglo pasado. Llevan de matute mercancías valiosas, como pieles
de astracán o medias de seda, pero también vulgares, como suelas de zapatos. También
ayudan a pasar la frontera a personas que huyen de la URSS, desencantados con
la revolución. El terreno en el que se mueven es agreste, el clima riguroso.
Los hombres de frontera, en la novela, poseen unos códigos de conducta
peculiares en los que destaca una ética que recuerda a otros muchos personajes
literarios, que buscan esquilmar solo al rico, pues algunos de estos
contrabandistas acaban convertidos en meros bandidos, buscando reventar las
incursiones de las bandas de contrabandistas rivales, aunque cuiden siempre de
no provocar víctimas mortales. De la lectura se infiere que el autor, Sergiusz
Piasechi, vivió realmente lo que cuenta o conoció muy de cerca a personas que
lo hicieron. La amistad y el amor cierto, vivido por el protagonista, son los
otros temas principales de la novela, de lectura agradable, aunque en algunos
pasajes resulte un poco monótona por la repetición de episodios casi idénticos.
A destacar también el movimiento de lectores de la novela, escrita en 1935 y en
la cárcel, que existió, según cuentan, entre la población de Polonia a finales
de los años treinta, para que el autor fuera liberado; tanto gustó en su momento.
Lástima que todo esto se olvidara rápido con la invasión de Polonia por los
nazis en septiembre de 1939 y el comienzo de la II Guerra Mundial.
Sergiusz Piasecki, El
enamorado de la Osa Mayor. Barcelona: Acantilado, 2010.
Traducción directa del polaco de Anna Rubió y Jerzy Sławomirski.
Víctor
Espuny.
No hay comentarios:
Publicar un comentario